Miro, miro y qué veo...
A través de la ventana
veo la inmensa naturaleza circundante
llena de variados y coloridos paisajes
que inundan mi alma.
Miro, miro y qué veo…
Si entro a mi casa
veo esa ventana que tanto me ha dado.
La paz me invade
y todo a mi alrededor parece cuidarme.
Miro, miro y qué veo…
Dos luceros luminosos
me permiten atrapar el mas allá.
Mis sentimientos rebozan de emoción
como creando una obra maestra.
Miro, miro y que veo…
Me veo a mí…
Veo mis días…
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jueves, 3 de diciembre de 2009
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